La señora Colleen Hoover es mi más reciente descubrimiento. Dirán que no he descubierto algo demasiado impresionante, pero ahí es donde diré que se equivocan.

Empecé a leer esta serie por accidente. Una amiga me regaló un libro llamado Finding Cinderella sin saber que pertenecía a una serie, lo hizo porque el nombre le gustó y porque yo empezaba a escribir una historia basada en Cenicienta (el cuento clásico), así que eso era más o menos su versión de apoyarme en mi “proceso creativo”. Gracias Ed.

El caso es que el libro era ultra corto y pasé toda la historia preguntándome de qué rayos me había perdido. Y lo supe. La historia de Daniel y su chica misteriosa era el puto B-Side de una bilogía llamada Hopeless.

De modo que empecé a buscar los libros. Y me enamoré.

Debo aclarar que no soy precisamente fan de las historias sobre traumas y cosas así, pero amo el drama. Contradictorio ¿no? Pues, no sé… yo soy así.

Leí el primer libro, Hopeless, y al terminar tuve sentimientos encontrados respecto al libro porque sí, es un gran libro, está hermosamente escrito y tiene un alto (y bien cuidado) nivel descriptivo; sí, es una historia de amor intensa y divertida como solo se vive a la edad de Holder y Sky (los protagonistas); pero también plantea cosas para reflexionar.

No tengo idea de las estadísticas, pero existen miles de personas que han sido o están siendo abusadas de muchas maneras en el mundo, y plasmar esa situación en este libro tiene que llamarnos a reflexionar. Incluso nosotros a veces acosamos o insultamos a las personas llamándolas perras/zorras/homosexual (algunas veces se trata solo de chistes privados, pero igual lo hacemos), descalificamos y provocamos pero rara vez intentamos conocer o entender. Pero podemos hacerlo con personajes ficticios, porque somos gente rara.

Así que leyendo este libro seguramente se sientan especialmente comprensivos por los personajes que son víctimas, quizás odien a los victimarios y hasta tengan una absurda necesidad de hacer justicia... porque la forma en que esta novela toca a sus lectores te hace sentir eso.

Otra cosa sobre este libro... desearía realmente conocer (en la vida real) a alguien como Holder para que me acompañe en los días brillantes y me sostenga en los momentos oscuros; entonces empecé a leer Losing Hope, que es la historia desde su punto de vista.

Nota al margen: Puso la marca muy alta, señora Hoover. Gracias por esta maravillosa novela. 

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